En Michigan, el expresidente y candidato republicano Donald Trump declaró el lunes en su último mitin de campaña que confiaba en ganar las elecciones contra la vicepresidenta Kamala Harris, que tendrán lugar este martes. “Creo que deberíamos gestionarlo con bastante facilidad. “Está completamente en nuestras manos”, dijo en Grand Rapids.
Trump criticó la lentitud de las máquinas de votación que cuentan los resultados y expresó su frustración: “¿Qué diablos está pasando en estas máquinas?” “Queremos la respuesta mañana, esta noche”. cerda, que podría tardar días en confirmarse debido a los resultados tan ajustados en varios estados.
La manifestación, que comenzó con casi dos horas de retraso en el Van Andel Arena, atrajo a casi 12.000 personas. Trump destacó la importancia de Michigan, estado que jugó un papel clave en sus campañas presidenciales, recordando que allí ganó en 2016.
A diferencia de su campaña final, Kamala Harris eligió Filadelfia, símbolo de la democracia estadounidense, donde estuvo acompañada de artistas como Lady Gaga y Ricky Martin. Trump no dudó en comparar los hechos, afirmando que Harris no pudo reunir a más de 100 personas mientras llenaba cuatro estadios.
Rodeado de sus hijos y alentado por sus seguidores, Trump tachó a Harris de “lunática de izquierda radical” y afirmó que su victoria podría resolver los problemas del país. En su discurso, destacó la necesidad de que la gente vote, destacando que su partido estaba “liderando por cientos de miles de votos” a pesar de que las encuestas mostraban un empate.
Durante el mitin, Trump reiteró varias de sus promesas de campaña, como la deportación masiva de inmigrantes y la imposición de aranceles contra China. También hizo referencia a sus intentos de asesinato y expresó su creencia de que “Dios me puso aquí para salvar este país”.
Finalmente, Trump se presentó como víctima de la justicia, argumentando que estaba compitiendo no sólo contra Harris sino contra “un sistema democrático corrupto”. Actualmente se enfrenta a varias demandas, incluidas tres relacionadas con el ataque al Capitolio y otros delitos, que logró posponer hasta después de las elecciones.